¿Querés ser tu propio jefe? Empezaría una típica promesa de cómo tener un negocio exitoso y de manera fácil, sin esfuerzo.
Derrumbando el mito
Tener tu propio negocio significa que vas a poner tu corazón en este nuevo proyecto. Es un camino difícil. Y ser tu propio jefe, significa tener muchos “jefes” dándote órdenes: Los proveedores, los clientes e incluso tus propios empleados.
Una vez aclarado esto, empecemos.
Un negocio que crece fuerte
Para que un negocio sea exitoso debe estar fuerte desde los cimientos. No existe una fórmula mágica para que destaque de entre todos los demás y se lleve puesto el mercado. Pero sí existen una serie de características que tienen en común los que llevan adelante negocios exitosos.
10 claves para crear un negocio exitoso
¿Ya te decidiste a ser un emprendedor? Llevá tu negocio al éxito siguiendo estos consejos:
- Libre de deuda: Los negocios no empiezan dando ganancia desde el día 1, es posible que estés varios meses cubriendo las pérdidas hasta que veas los primeros billetes. Así que si estás endeudado por otros motivos, primero pagá tus deudas.
- Preparate para hacer sacrificios: Llevar un negocio es un trabajo duro. Sobre todo a los inicios, es posible que tengas que hacer sacrificios sobre todo de tiempo personal. Eso significa pasar menos tiempo con familia y amigos y trabajar muchas horas. Sos el máximo responsable de tu proyecto.
- El producto, además de ser de buena calidad, debe ser único (algo que lo diferencie de los demás) y consumible (que las personas vuelvan a adquirir tu producto o servicio periódicamente)
- La elección del mercado es fundamental. Elegir bien el segmento al que te dirigís puede determinar en gran medida tu éxito. Buscá un sector que esté en alza y no uno que ya haya alcanzado su máximo potencial.
- Organización y planificación: No podés ir tomando decisiones al momento sin un plan, sin objetivos y sin visualizar un futuro. Es decir, sí podés, pero no te va a llevar a donde querés. Un negocio exitoso requiere de una estrategia comercial y de marketing con objetivos claros y valores establecidos. Incluso te ahorra mucho tiempo para tomar ciertas decisiones.
- No quieras hacer todo solo. La mayoría de los emprendedores comienzan haciendo de todo. Eso no solo es mucho desgaste, sino que no podés ser experto en todo ni estar pendiente de tantas cosas sin quemarte. Aprendé a delegar en personas de tu confianza.
- Pensá en grande. Para que tu negocio crezca debe ser escalable, eso significa que de aumentar la demanda debe poder aumentar la producción.
- No tengás miedo de tomar riesgos. Como emprendedor no vas a estar cómodo. Es una situación un tanto inestable. Y los riesgos son parte de tu día a día. Está demás decir que me refiero a riesgos pero con cabeza.
- Reinvertí. No te conviertas en esos dueños que sacan todas las ganancias y las utilizan para costear sus estilos de vida. Tu negocio necesita retroalimentación. Parte de ese dinero debe volver para que siga creciendo. Una opción por la que muchos optan es auto-pagarse un sueldo como si fueran un empleado más.
- Los otros involucrados. Tanto el equipo de trabajo como los proveedores y otras empresas con las que se interactúe deben estar alineados con los valores y objetivos de tu negocio.
¿Estás preparado para asumir el reto?